A hombros por la Puerta Principal
Pepe Martínez corta dos orejas en la final de la Novilladas de Promoción y se proclama triunfador del ciclo 2024
Para ello en los chiqueros había encerrados seis novillos de Gabriel Rojas, bien presentados y que dieron un juego variado, con una nobleza generalizada y con distintos grados de bravura.
Y el triunfador del festejo, y por ende de esta edición, fue Pepe Martínez, un novillero de Valencina de la Concepción (Sevilla). Este torero es todo corazón y ganas. No se dejó nada por hacer. Su actitud es siempre combativa. Cortó una oreja en cada trasteo con dos faenas de mucha garra. Así lo demostró en su primero con el capote tras recibirlo con verónicas entonadas y luego dejar un quite por tafalleras con media y revolera de remate que ya enganchó a los tendidos y a los que no dejó escaparse en ningún momento.
Este primer novillo de Gabriel Rojas manseó en los primeros tercios, para luego romper en la muleta metiendo la cara con nobleza y repitiendo las embestidas, en una faena larga de Martínez, y en la que a veces pecó de excesos de ganas, bendita virtud, pero en la que siempre plantó los pies en el albero y se lo pasó por la faja con indudables deseos de triunfo. Lo mató de estocada desprendida sin puntilla y cortó una oreja.
Al cuarto lo recibió de rodillas a portagayola y la hilvanó a verónicas y chicuelinas aplaudidas. Luego lo brindó a su banderillero Leonardo Palacios y comenzó por ayudados por alto también de hinojos. El novillo se fue afligiendo ante tanta disposición y posiblemente hubiera durado más con una faena más dosificada en cuanto a exigencia, pero el aljarafeño entiende el toreo de esta forma y además cala rápidamente en los tendidos, por lo que su éxito está casi asegurado. Martínez sorteó alguna mirada a destiempo de su novillo sin inmutarse. Terminó con manoletinas muy en corto ya con sus seguidores, muy numerosos, entregados y con gritos de torero, torero. Lo volvió a cazar a la primera con otra estocada desprendida y le pidieron las dos orejas con fuerza, de las cuales la Presidenta solo otorgó una.
Las aptitudes de Manuel Troncoso son otras, tiene hasta cierto aire de fragilidad, pero para nada es así ya que su primero en el recibo de capote le dio cera con dos fuertes volteretas y en ningún momento se amilanó. A pesar de estar menos rodado, su toreo se fundamenta en el estilo clásico. La muleta siempre por delante y aunque no terminó de acoplarse al buen novillo, dejó buenos pasajes, como el final de faena con toreo por bajo muy expresivo. Mal con la espada, siempre entrando con el brazo muy por delante y pinchando en tres ocasiones antes de dejar la estocada, lo que le hizo perder posiblemente un trofeo.
E igual le pasó con su segundo novillo, más desclasado y con menos son que su anterior, y en el que también falló con el estoque y desmereció su actuación, escuchando dos avisos y echando por tierra una labor meritoria que consistió en meter poco a poco las flojas embestidas de su eral en la muleta, a la par que también metía el público, disperso en ese momento. La faena resultó algo enganchada por la flojedad del animal, pero en la mitad de la misma, y como remate de una de las series, surgieron de las manos del sevillano de Los Palacios dos pases de la firma y dos muletazos por bajo plenos de torería. Volvió a realizar otro trasteo medido.
Y Jorge Hurtado tampoco desentonó y eso que se llevó el lote menos lucido. Su primero resultó un novillo pegajoso y con una embestida a veces descompuesta, pero el extremeño logró ordenarlo y le sacó todo el partido que tenía. Logró corregir el molesto cabeceo del animal a base de temple, logrando muletazos lentos y de muy buen aire. Un cambio de mano fue de cartel. Paseó una oreja tras casi entera trasera.
Y con el último también estuvo bien. El novillo fue el más cuajado del encierro y resultó complicado por sus embestidas a la defensiva, síntoma de su falta de fuerzas. Con el capote no estuvo a gusto, pero tras brindar al novillero Javier Zulueta, dejó una faena templada en la que su primera virtud fue la de afianzar al de Gabriel Rojas, y cuando lograba que no le enganchara, dejar pases limpios y largos. Dio también varios circulares citando de espaldas. Y el final, ya si música, por bajo, también fue bueno. Pero todo se diluyó por pinchar hasta en seis ocasiones antes de la estocada final.
FICHA DEL FESTEJO
Jueves 25 de julio de 2024. Plaza de toros de la Real Maestranza de SEVILLA. Final de las novilladas del XXXVII “Ciclo de Promoción de Nuevos Valores de la Torería 2024”. Comienzo a las 21 horas. Casi 3/4 de entrada. Y temperatura veraniega agradable.
Seis novillos de GABRIEL ROJAS: bien presentados y de juego desigual. 1º y 2º bravos, 3º pegajoso, 4º mirón a menos, 5º soso y desclasado y 6º flojo. Todos con el denominador común de la nobleza.
PEPE MARTÍNEZ (Valencina de la Concepción, Sevilla - de rosa palo y oro): estocada desprendida (aviso y oreja); estocada caída (aviso y oreja con petición de la segunda).
MANUEL TRONCOSO (Escuela Taurina 'Curro Guillén' de Utrera, Sevilla - da azul turquesa y oro): tres pinchazos y estocada corta atravesada (aviso y silencio); tres pinchazos y estocada (dos avisos y silencio).
JORGE HURTADO (Coria, Cáceres - rosa y oro): casi entera trasera (oreja); seis pinchazos y estocada (aviso y saludos).
Cuadrillas:
Con las banderillas se desmonteró en el 2º José Manuel Vera. Y también destacó en el 3º, Miguel Murillo.
José Luis Triviño resultó cogido en el tercio de banderillas del 6º de forma aparatosa pero por fortuna sin consecuencias.
Al final del festejo Pepe Martínez salió en hombros por la Puerta Principal o de Cuadrillas.
