El artista Rafael Herrera continúa con sus intervenciones en los transformadores del entorno del teatro de La Villa, donde ya tiene varios murales, para rendir, en esta ocasión, homenaje y reconocer el trabajo de esta pintora, una de las grandes de la historia del arte y que fue una de las principales propagadoras del estilo de Caravaggio

Es algo común en la historia silenciar a las mujeres y el caso de Artemisia Gentileschi (Roma, 8 de julio de 1593-Nápoles, hacia 1656) no es una excepción. Una de las grandes pintoras del barroco italiano, no sería hasta finales del siglo XX cuando fuese recuperada su figura y, aún así, sigue siendo una gran desconocida para la mayoría del común de los mortales que sí conocen a sus coetáneos masculinos.

La historia de Artemisia es apasionante y un ejemplo de superación y de feminismo. Violada cuando tenía 18 años por su profesor Agostino Tassi, quien era amigo de su padre, el también artista Orazio Gentileschi, la artista se atrevió a denunciar a su violador y sufrió un juicio donde llegó a ser torturada para comprobar si mentía. Finalmente, Tassi fue simplemente condenado a un año de exilio y ella fue casada por su padre para devolverle “su honra”.

A pesar de todo esto, Artemisia no se rindió y siguió pintando, siendo la primera mujer en pisar la Academia de Bellas Artes de Florencia, expresando, a través de su pintura, la injusticia social a la que había sido sometida y pintando a mujeres fuertes dueñas de su destino.

“Quería pintar algo del Barroco y dar a conocer a Artemisia, su historia y obra. Tenía un enorme talento, trabajó en Florencia, Venecia, Nápoles, Roma y Londres, convirtiéndose en la pintora más prodigiosa de su tiempo, dominando el claroscuro a la manera de Caravaggio”, explica el artista Rafael Herrera, que se encuentra pintando un mural en homenaje a esta pintora en el transformador del conocido como parque de los Gnomos, frente al teatro de La Villa. Mural que se suma a los realizados por Herrera, en este entorno, donde ya tiene finalizados uno dedicado al fotógrafo Philippe Halsman y otro al cineasta Alfred Hitchcock.

Así, en este nuevo mural, que pasa a formar parte del Museo Urbano al Aire Libre de La Rinconada, Rafael Herrera ha representado el cuadro de ‘Judit decapitando a Holofernes’ de Artemisia y en el que la artista quiso vengarse de Tassi por la violencia sufrida, y también un autorretrato de la autora.

La delegada de Cultura, Raquel Vega, que ha visitado al pintor local durante su intervención, ha felicitado a Rafael Herrera por el trabajo que viene desarrollado en estos murales, y ha resaltado que, “pese a los logros conseguidos, las mujeres han sido silenciadas a lo largo de la historia, y es importante y necesario que las recuperemos, que las demos a conocer a la ciudadanía; porque junto a pintores como Rembrandt, Zurbarán o Bernini, hubo una artista que triunfó en un mundo exclusivamente masculino en las principales cortes europeas”.

Museo Urbano al Aire Libre
Desde 2017, diferentes artistas dejan su impronta en diferentes espacios del municipio, una forma de democratizar el arte y disfrutar de lienzos que forman parte de la escena urbana. Se trata del proyecto del área de Cultura, en coordinación con el Museo de La Rinconada, Museo Urbano al Aire Libre, que cuenta ya con una veintena intervenciones.

En palabras de Vega: “La Rinconada es una ciudad comprometida con las artes en sus distintas manifestaciones y apuesta de modo progresivo por la incorporación de la pintura y la escultura en la transformación de la escena urbana. Este es un proyecto que lleva arte a las calles y a las plazas y que apoya el talento local de nuestros artistas”.
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