Se conceden unos 200.000 € en subvenciones
El Ayuntamiento de Bormujos y Caixabank diseñan la tarjeta prepago para el reparto de ayudas sociales
El Ayuntamiento de Bormujos y la entidad CaixaBank han formalizado un acuerdo para la puesta en marcha de las tarjetas prepago, una fórmula para hacer llegar ayudas sociales a las familias del municipio, de manera más operativa, transparente y digna para los necesitados.
Mediante este convenio de colaboración, que han firmado el alcalde, Francisco Molina con la directora de área de de negocio del Aljarafe de Caixabank, Inmaculada Tristán, se fiscalizarán con mayor agilidad los más de 200.000 euros de ayudas anuales que los servicios municipales hacen llegar a las familias en situación más vulnerable.
En el acto de presentación de las tarjetas han estado presentes además el delegado de Economía y Hacienda, Rafael Díaz, la delegada de Bienestar Social, Leonor Benítez Mata y por parte de la entidad la directora de banca de instituciones de Sevilla, Vivian Martínez Roncero y el director de la sucursal de Caixabank en Bormujos, Juan Reguera Fernández.
Discreción y fiscalización en las compras
Las tarjetas permitirán por un lado que los beneficiarios acudan a los comercios conveniados de la localidad haciendo uso del dinero, que se les ha concedido mediante subvenciones concretas, sin necesidad de documentos acreditativos ni autorizados, lo que les ofrece mayor discreción. Por otro parte, para los establecimientos representa además una ventaja, puesto que reciben el dinero de la compra directamente, no teniendo que esperar los plazos administrativos para su cobro.
El Ayuntamiento de Bormujos, de esta forma, dispone además de un control directo sobre la procedencia de ayudas y potencia el comercio local, puesto que la tarjeta será útil en negocios del municipio únicamente.
Las tarjetas prepago, que adjudicará a los beneficiarios la Delegación de Bienestar Social, podrá emplearse para la distribución de subvenciones sociales en cuestiones como la alimentación, material escolar, pago de servicios básicos como la luz o el agua y productos de necesidad inmediata.
