El libro es un canto a la vida, a la lucha y al amor incondicional de una madre que le presta a su hija su voz en un fundido de almas. Además de concienciar sobre la discapacidad y sobre una de las más duras barreras que nos puede plantear la vida, la de la incomunicación, madre e hija quieren, con este libro, despertar el amor por el lenguaje y por el léxico, a pesar de que la voz que narra está atrapada en un "deslenguaje" que surge de un cerebro dañado que no se formó como debiera y que le da muchos quebraderos de cabeza. Y lo hacen en todo momento desde el humor y desde el amor, sus únicas, pero potentes, tablas de salvación.
Ambas piden una oportunidad. Porque el entendimiento trasciende las palabras y se posa, con sutileza y precisión, en las miradas, las sonrisas, los gestos y los abrazos. No solo se mira bien desde el corazón, sino que también se puede escuchar desde el mismo lugar.
La autora estará acompañada de su amigo y compañero de departamento en el IES Itálica de Santiponce, Nico González Guerra.
Entradas libres hasta completar aforo.
